sábado, 11 de agosto de 2012


"Un relato a modo de propuesta en torno a intervenciones desde la Comunicacion/Educacion"

En la Pagina Web de la Secretaria de Cultura de Presidencia de la Nación existe un link que hace referencia detallada del  “Programa de Orquestas Infantiles y Juveniles” (www.cultura.gov.ar/programas).  Y expresa:  “El Programa Social de Orquestas y Bandas Infantiles y Juveniles se inicia en el año 2004, habiéndose conformado al día de hoy una red con presencia en 18 provincias, con la participación de 2.000 niños y 300 docentes músicos. El programa promueve y coordina jornadas de capacitación instrumental y orquestal y encuentros tanto a nivel regional como a nivel nacional, a la vez que provee de instrumentos, de material musical y de asesoramiento integral en la conformación de la orquesta. Se trata de un proyecto esencialmente comunitario que involucra directamente a niños y jóvenes, promoviendo su desarrollo integral a través de la sensibilidad y la tarea solidaria y beneficiando indirectamente a las familias y al medio social que éstas integran.”
Hago mención al mismo porque cuando volví a tomar contacto con la bibliografía de Jorge Huergo y de María Cristina Mata, me vino a la memoria y me resonó el recuerdo de haber participado en la etapa inicial de ese programa, hace varios años, por el hecho de desempeñarme, en esa época,  como Trabajadora Social en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.  Por lo cual, tuve la oportunidad de participar no solo del diseño, planificación del “Primer Encuentro Nacional de Orquestas Infantiles y Juveniles”, sino de vivirlo casi desde adentro, ya que mi zona de trabajo era el Noroeste Argentino, por lo cual, mi rol tenía que ver con acompañar el proceso de las bandas surgidas en el ámbito de  localidades incluidas en esa zona geográfica.
El recuerdo de ese proceso está muy relacionado con lo que plantean los autores mencionados. Sobre todo ahora, cuando han pasado más de 8 años de esa experiencia y uno, posicionado en otro rol (ahora siendo parte de una escuela) ,  puede identificar  y valorar su  riqueza más que en términos de resultados, en términos de proceso de producción social.
Es decir,  en aquel momento mi mirada estaba enfocada en poder acompañar el proceso de  apropiación y participación de comunidades específicamente pertenecientes a localidades de la provincia de Jujuy. Comunidades caracterizadas por su situación de vulnerabilidad social, es decir, por una situación  de precariedad laboral, fragilidad institucional (a todo nivel) y con el debilitamiento de  relaciones familiares, comunitarias y sociales, todo lo cual conforma lo que conocemos como tejido social.  En esas comunidades, la escuela representa no solo una autoridad a nivel formativo, la escuela suele ser el principal referente para el mundo de las relaciones comunitarias, mucho más que un espacio físico posibilitado del encuentro social.
En ese sentido, trabajar con y para las escuelas es una oportunidad concreta de generar acciones sencillas, concretas,  que puedan impactar directamente en la vida de esas  comunidades, la mayoría de las veces en un lugar marginal en relación al resto de la sociedad.  Marginales también en relación a la posibilidad de trascender su frontera física y darse a conocer al resto del país desde sus producciones culturales propias y particulares. Por el contrario, la mayoría de las veces parecerían se  mas bien receptoras de lo masivo, de lo que viene “de afuera” ; cuando en realidad “lo de afuera” no tiene que ver con lo extranjero, sino con percibir así a lo que se construye y llega desde la zona central y sur del país…
Una experiencia como esta es un buen ejemplo de que los procesos educativos  no se limitan a lo que acontece en el ámbito institucional propio de la escuela; ni que la comunicación tenga que ver con la mera trasmisión de información.
Una experiencia de estas características puede considerarse una propuesta, entre otras, de intervención desde la Comunicación/Educación.
“intervenir a partir del campo de comunicación /educación implica un reconocimiento del mundo cultural de los sujetos (en términos de Paulo Freire el universo vocabulario) para desnaturalizar prácticas hegemónicas. (…)Desde la pretensión de trabajar con el otro y para el otro, teniendo presentes que sentidos queremos despertar, como también que practicas hegemónicas pretendemos horadar”” (Jorge Huergo).
El proceso de trabajo junto a los alumnos, docentes de las comunidades que participaron en esta propuesta  incluyo necesariamente la convocatoria a la participación de otros miembros de la comunidad.   Implico la participación en la etapa de preparación (viajando a las comunidades para colaborar con las escuelas en el proceso), en la instancia de realización del Encuentro de Bandas, en un teatro de la Ciudad de Buenos Aires y también en un espacio de dialogo posterior, otra vez, en la localidad de Jujuy a la cual pertenecían las bandas que se habían sumado al Encuentro.
A la hora de evaluar la experiencia pude reconocer mas claramente la importancia de estimular, promover la conformación y sostenimiento de orquestas locales como una estrategia de desarrollo integral, las cuales, desde una mirada preventiva y promocional, planteen una propuesta diferente dentro de la cual puede incluirse el proceso educativo.  Y además, connotando positivamente el aspecto comunicacional inherente a prácticas de este tipo, pues brinda la posibilidad de que las culturas más marginadas puedan integrarse desde un rol más activo, mostrando sus saberes.  En paralelo, un evento de las características mencionadas como propias de los Encuentros de Orquestas se torna en un espacio de encuentro, de comunicación cultural, de dialogo, donde todos los alumnos, los docentes y cortes sociales participantes se sienten impactados…dando lugar a una interrelación que necesariamente y sin que pueda especificarse claramente sus formas y alcances, provocan una modificación mutua, a partir de la apropiación mutua, del intercambio de sentidos: 
• Por tratarse de un aporte comunicativo/ educativo muy significativo, pues significaba la oportunidad de expresar la cultura propia, otorgándole un nuevo sentido a lo local, al poder ponerlo en relación con la cultura local propia de otras bandas que participaban, representantes de otras ciudades de distintos puntos del país. 
• Por la posibilidad que brindo a todas las comunidades implicadas respecto a poder dialogar, utilizando la música como disparador, con otras bandas que representaban y mostraban culturas diferentes, sobre todo aquellas pertenecientes al centro del país (mas ligadas a una cultura mas masiva, más extendida y apropiada por un número mayor de habitantes). LA experiencia de compartir la música autóctona, típica de su región, sus propias producciones locales, significaron para muchos alumnos la primera oportunidad de interrelacionar con otros niños/jóvenes con los cuales tenían en común, mas allá de los ribetes diferentes de su cultura especifica, el amor por la música y la apropiación de la música como medio de expresión, como forma de llegar a otros.
• Al decir de Beunfil Burgos “ se refiere a la interpelación  de convocar al individuo a convertirse en sujeto, modificando su práctica cotidiana  en términos de transformación  o en términos de reafirmación mas fundamentada” también , alineado a lo planteado por Verón y Sigal:  “ lo que ocurrirá probablemente, es que entre los posibles que forman  parte de ese campo , un efecto se producirá en unos receptores y otros  efectos en otros.  De lo que aquí se trata es de una propiedad  fundamental del funcionamiento discursivo, que podemos formular como el principio de la indeterminación relativo del sentido: el sentido no opera según una causalidad lineal”
A su vez, experticias de estas características ofrecen la posibilidad de generar nuevas estrategias de abordaje, de construcción de practicas escolares que integren en forma interrelacionada lo contextual, lo cultural, lo educacativo, lo comunicacional, en la línea de acercarnos a procesos de apropiación críticos, centrados no solo en  la noción de alumnos/ docentes, sino fundamentalmente de sujetos en termino  de “ciudadanos”, incluidos en la cultura nacional a partir de ejes que hacen a su identidad propia.

                                                                                                                                    Vale Navas

2 comentarios:

  1. Excelente el post Vale. Me sorprende cómo articulás memoria y teoría. Muy interesante la experiencia que comentás.
    Pero para ser un post, quizás resulta algo extenso y monótono. Deberías incluir imágenes, algún audio de la orquesta tocando... Por lo menos pusiste el link a la página de la secretaría ¿no? Esa es la onda del hipertexto... se va entendiendo, creo.

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  2. Gracias Pablo! No puedo incluir video porque no tengo, pero creo que puedo agregar otros links que se refierena expericiencias similares en otros lugares de America latina, voy ver si los encuentro.

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