¿Que suponemos que los alumnos esperan de una clase?
Cuando comenzamos a diagramar una propuesta áulica los docentes planificamos basándonos en los contenidos que son previstos para el grupo de pares que nos han asignado. Ahora bien ¿Es cierto que pensamos en función de las necesidades que presentan cada uno de los integrantes del grupo? ¿Verdaderamente pensamos acerca de la didáctica que utilizaremos? Y por último, pero no menos importante, ¿Dejamos espacio para la reflexión?
Estos interrogantes no son menores para repensar a la escuela de hoy. Cada ser humano se siente capacitado para dialogar acerca de las distintas prácticas educativas, simplemente porque todos la hemos transitado.
En la actualidad partiendo de mi práctica profesional puedo asegurar que la misma ha tenido transformaciones varias. Recuerdan ustedes una clase donde el docente no haya utilizado a partir de un texto diversas preguntas direccionadas que facilitaran el dialogo. Probablemente si, hagamos ejercitar nuevamente la memoria, la o el docente citaba la pregunta y luego el alumno buscaba el párrafo donde dicha pregunta se respondía, sin ningún tipo de construcción por parte del estudiante. Pregunta uno párrafo uno y así sucesivamente. Desde esta perspectiva es importante consignar que no se logra a partir de los contenidos que se plantean organizar modos de pensamientos críticos que posibiliten en los alumnos la inclusión de saberes realmente significativos.
Situémonos ahora en la actualidad se puede otorgar solo material bibliográfico contando con niños y jóvenes que desde la primea infancia saben utilizar la computadora, usan sin dificultad celulares etc. A mi parecer las generaciones han evolucionado sin dudar con el correr de los años. Es solo actuar de observadores para visualizar que aquel alumno que se sentaba pasivamente a escuchar una cátedra, ya no existe. Es por esto que los docentes tenemos la tarea de propiciar espacios de dialogo y reflexión. Realizando diversos análisis comparativos entre los medios de difusión colectiva y la escuela. Ya que ambos son “trabajadores discursivos”. También es importante utilizar herramientas que se van incorporando a nivel cultural en las sociedades. De lo contrario somos nosotros quienes nos excluimos.
Porque me centro en este aspecto, vuelvo a hacer referencia a este concepto “los alumnos ya no son pasivos” debemos otorgarles un lugar de acción, de búsqueda. Donde los conocimientos sean significativos para los docentes y alumnos. Ya que dentro del espacio áulico se divisan aprendizajes constantes desde los diferentes actores. Aplicar ambos ejercicios de reflexión y aprender a realizar cuestionamientos desde el saber.
Gisela Plenzich; correccion modulo inicial
PABLO CUANDO LO PUBLIQUE SE CORRIERON LAS IMAGENES. DENTRO DEL TEXTO QUE FORMULE AGREGUE TRES CONCEPTOS BASICOS QUE PLANTEA PIETRO CASTILLO. ESPERO QUE SE ENTIENDA MEJOR MI IDEA!!
ResponderEliminarel ultimo párrafo creo que también puede hacerse la lectura referente al texto de Mario Kablum, donde pasar de la tendencia de tipo exógena, donde tomamos en cuenta las prácticas educativas tradicionales, donde el saber no estaba ubicado en el alumno. El alumno como objeto, sin poder pensarlo como sujeto de un saber, a prácticas de tipo endógena y generar el intercambio, poder escuchar al jóven,en el "proceso de diálogo".
ResponderEliminarMe gustó mucho lo que escribiste Gise.
Hacés una apropiación muy personal de los temas del módulo. Lo hablamos mejor en la evaluación final. Nos vemos
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